Con esta fecha

Con esta fecha
(un día cualquiera en la memoria)
quisiera cantarte la importancia
que tienes para mí
…mientras la ciudad se confabula
para que te recuerde en su gente:
en los peinados clonados como tarabillas
en los pantalones usados de las chicas
en el moderno empeño de mostrar las caderas
—las cinturas desnudas como extensión
de los glúteos que quieren ser mostrados—…

La distancia, antes de que digas alguna cosa
no es más que una idea sin importancia a la velocidad del sonido
¿Sabías que las tarifas aéreas han bajado considerablemente?
¿Que los autos y las carreteras cada día son más y mejores?
¿Qué te puedo ver en mi teléfono?
¿Qué las computadoras transmiten tu voz?
de manera que puedo tenerte cerca
tan pronto se decida

Tu presencia en mi vida tiene la importancia del mármol que dejó Miguel Ángel en sus esculturas, tiene, la importancia de mi primer pasaporte y la de las runas con que espanto a todo lo que me da miedo. Eres un dintel alabastrado que deseo en la penumbra, a todas horas, porque lo que tú me brindas no es calor ni alegría sino la sustancia subjetiva con que me ha sido dado imaginar y soñar, crear e inventar, platicar y pensar.

Eres casi un fantasma, una sombra, un delirio esquizofrénico. Una puntual hora en medio del desierto, de la aurora, de las noches bohemias que son mis días. Porque tú eres la dieta diaria y lejana que me alegra el hoy y me alimenta. Porque sin ti, sin tu presencia, hace ya tiempo que yo hubiera dejado olvidado el monedero donde suelo poner los recuerdos. Y no quedaría más de mí que mis manos muertas escribiendo.

Te quiero por la delgada silueta que retengo en mi memoria como un rayo de luz que me da consciencia del deseo. Te pienso, como se repasan los víveres cuando voy de campamento: sin olvidar nada. Porque acampar contigo es meternos dentro de un sleeping recostados debajo del cielo mirando la profundidad del espacio —las estrellas como un juego didáctico, como una bola de plástico con múltiples caras para intentar meterlas.

Tienes la importancia de las velas y el aserrín. La importancia del viento. La importancia de una guitarra o un libro o un velero. Es decir, tienes la importancia de las cosas esenciales: un barquito de papel, un avioncito de papel, un dinosaurio de papel, una carta escrita a la vieja usanza: en papel perfumado. Otra vez, es decir: tienes la importancia de un material que se recicla, porque tú eres como una celulosa que me hace falta para terminar un libro.

3 años te he esperado, tres

3 años te he esperado, tres
como toros, como retos
igual de impacientes
tiritando de rabia
Navegando por doquier sin hallar nada
apenas una semilla o un germen
Un átomo que estalla en mi cabeza
y la quiebra, y la satura
y la envuelve en su marisma
Que quema y ahuyenta
como si desear fuera una tortura
y la espera un prolongado beso
nada marginal, nada ausente
como límpido aroma del estás aquí
ahora, eternamente
en la espera quemante
en el huidizo enjambre
que son tus manos multiplicadas
acariciándome
tomando lo que creen es de ellas
Y por eso se aferran y gimen
en la hora visceral del renacer
siempre
acadapasoquedamos como serpientes
enredados, infinitamente traspasados
como olientes combatientes
como guerreros kamasutranos
como peces en sábanas móviles y acuáticas
sembrando en las dunas cuánticas
de la espera
del abrazo esperado
del desesperado deseo
que es estar abrazados
acá en la distancia
(que se acorta):
a unos cuantos píxeles
a dos cuartas se encuentra de mis manos /
tu piel, que no es más que la alfombra mágica /
en la que volamos ondulando /
en las ráfagas del viento
Sigo pensando que de tu vuelo
depende la cita del tiempo
la frase preferida de la distancia
o el deseo que se esconde
en cada rincón de los labios
y en cada palabra que leo o que escribo
porque tú eres también
una forma de escribir la realidad
y también una manera de pensar
Porque entre tú y yo ya sólo queda
una mínima distancia
y ahí cabe, aún
la posibilidad infinita de tocarnos

Como plumas livianas

A Gavita García Vargas, con amor


Como plumas livianas
así tus besos
así tus brazos
como caricias de agua
—potable porque tú la haces posible—
casi nube, casi luz, casi siempre

Porque el amanecer
no es el mismo
sin tu rostro
sin las lágrimas que te brotan
cuando te beso después de mucho tiempo de ausencia

Tu cabello enredado en mis recuerdos
y el pequeño cuerpo que tienes
enredándose como yerba sobre el mío

O tus pisadas ligeras y torpes
danzando por toda la casa en rondines
—cuidando nuestras sombras y pensamientos—

Me impresiona el estoicismo con que nos abrazas
y el coraje que llevas en tus brazos
(Por ti, mis hijos y yo te seguiríamos a la guerra)

Tu mirada, tu esfuerzo, tu inteligencia
son los formas precisas de un quehacer cotidiano
que nos abriga y consuela

Porque tú eres la salvaguarda de este hogar
construido de sueños, de imaginación
porque los que aquí respiramos
vivimos del maíz que tuestas
y del arroz que remojas
para dárnoslo a beber en aguas frescas

Sí, tú, allá, siempre, todo el tiempo
marchando a cuestas con la esperanza
como un principito observando atardeceres
que son la respuesta diaria a tu vocación:
amarnos en la palabra
en la infantil imaginación
en la augusta felicidad de mi ser y de mis seres

Porque tú aunque no quieras
eres nuestro destino
la gran placenta que nos envuelve
el líquido amniótico que nos contiene
que nos da fuerza y calor

Que nos vuelve hombres cada día
(como si a diario nos dieses a luz)
y nos tendieras en tu regazo
y luego nos lanzaras a conquistar el mundo
—con las mochilas a cuestas
y los pantalones sujetos con cinturones de cuero—
desfilando como soldaditos de plomo

Tú que eres franca sonrisa
que llevas un manos libres cuando andas
para poder ocuparte a cada instante
de lo importante, de lo esencial
que son nuestras vidas
en tu presencia

Tú que apenas dejas tiempo para sí misma
que estudias de noche y a las velas
que miras las estrellas como si miraras personas
tú, que sabes de palabras y sonrisas
que eres mayúscula y consonante y vocal
cuando nos ves o nos tocas

Mientras nosotros permanecemos en silencio
en el estado en que nos sentidos supernaturales
y como tú, también miramos a las estrellas
y comenzamos a charlar como si fueran alguien

Y bebemos agua que nos haces y destilas
comemos tus alimentos-rituales y sagrados
nos entregamos al feliz entrenamiento de vivir
con una mujer que nos quiere libres, sin ataduras
porque sabe que no existe peor castigo
que ser prisionero de uno mismo

Nosotros somos libres gracias a ti
que nos abres la puerta todos los días
para que marchemos al destino
a nuestra vocación
que es ser sin que se sepa
porque lo contrario sería faltar a lo más elemental:
a la confianza que has puesto entre nosotros