Tú eres, si no la única
la que me ha llamado guapo
de una manera inolvidable
Le pusiste un acento preciso
modulaste la voz con tu propio cuerpo
(puedo contar con tu agitación
cada vez que lo articulabas)
Entonces eres indispensable
como mis vasos de agua matinales
o mi café nocturno
Porque tú has dicho mi nombre
y mis palabras como una gitana
lo hace con las cartas
Por eso te recuerdo siempre:
pronunciando palabras
diciendo las cosas por su nombre